Marzo 5
Cheques del Banco de la Fe - C.H.Spurge
Él bendecirá la morada de los justos.
Proverbios 3:33
El justo teme al Señor, y, por lo tanto, está bajo la protección divina que se extiende hasta la techumbre que cubre a su familia. Su casa es morada de amor, escuela de sana educación, y hogar de luz divina. Es como un altar donde se le rinde culto diario al nombre del Señor. Por esta razón Dios bendice su morada. Tal vez ésta sea humilde choza o casa seño-rial: mas la bendición del Señor desciende sobre ella, no a causa de su grandeza, sino por el carácter de sus habitantes.
Esta casa es bendita cuando los esposos son temerosos de Dios; empero el hijo o la hija, y hasta un criado cristiano, pueden atraer las bendiciones sobre toda la casa. Muy a menudo, el Señor guarda, prospera y bendice a una familia porque en ella hay una o dos personas que son «justas» por la gracia de Dios. Amados, tengamos a Jesús como huésped cons-tante en nuestra casa, como le tuvieron las hermanas de Beta-nia, y entonces seremos ciertamente bendecidos.
Procuremos ser justos en todas las cosas: en nuestros negocios, en nuestro juicio sobre los demás, en nues¬tro trato con el prójimo, en nuestro carácter personal. Un Dios justo jamás podrá bendecir transacciones injustas
No hay comentarios:
Publicar un comentario
gracias por tu comentario